23 ago 2011

No pensaba dejar que te fueras sola...

...y ahí estaba yo, corriendo a refugiarme en el reflejo de tus ojos, y corriendo a refugiarte en el recuerdo de los míos. Y entonces esa dichosa sonrisa que me derrite las entrañas. Entonces, y siempre, todo ese tú, que te deslizas como si fueras de viento a tus anchas por mi vida, elevando, ondeando, volando; jugando con cada pedazo de mi corazón que te pertenece, llevándotelos contigo, deshielándolos con ese calor que emana de tí y te y nos envuelve. Y entonces apareciste tú, y me hiciste sonreír.

2 comentarios:

  1. Gracias por seguirme.
    Tu blog es fantástico.
    Y entonces esa dichosa sonrisa que me derrite las entrañas. Buff me ha encantado. Y las dos fotos de abajo son geniales.

    Un beso!

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